PACHÉ MERAYOGijón.Viernes, 21 agosto 2020, 02:22
La asociación que vela por la obra de Ibarrola se citó con la viceconsejera de Turismo, que apoya la recuperación del centro de interpretación
Los problemas vienen de largo, el deterioro también, casi de tan lejos como las protestas por la falta de soluciones. Pero ni unos ni otras han logrado que los Cubos de la Memoria, esa obra monumental con la que el gran escultor Agustín Ibarrola transformó la escollera del puerto de Llanes en un bello homenaje al presente, la cultura y la historia, detengan la cuenta atrás de su desgaste.
De momento, la asociación se conformaría con que el edificio que en su día se levantó para ser centro de interpretación e información sobre la obra de Ibarrola «deje de ser almacén del Club Náutico y vuelva a su destino original».
Tal edificación -diseñada a imagen y semejanza de uno de los cubos del escultor vasco- podría ser, dice María Izquierdo, un moderno centro tecnológico que pusiera en valor la magna obra llanisca. «Mañana mismo» (por hoy) la presidenta de la asociación acudirá al Ayuntamiento «con los consejos de la viceconsejera para lograr de una vez por todas la restitución del uso del mencionado edificio». No se puede olvidar, advierte, «que el Consistorio es el responsable de la obra y está obligado a su mantenimiento».
De todos modos, la subvención del Principado y la responsabilidad municipal no son las únicas fuentes a las que quiere acudir Izquierdo paraevitar los problemas de deterioro de los Cubos de la Memoria. La asociación, que lleva tiempo buscando mecenas privados con no poco éxito, aunque no suficiente (y aún sin consolidar técnicamente como un mecenazgo), pretende lograr parte de los presupuestos destinados al Año Xacobeo.
Sobre cuáles son los requisitos para realizar dicha solicitud, también le aconsejó Graciela Blanco, aunque estos se destinarían ya directamente a acometer una obra de restauración, un plan en el que lleva tiempo trabajando el Foro Veneranda Manzano y que cuenta con el apoyo de empresarios y artistas, algunos, incluso, de los que trabajaron con Ibarrola. «Tan pronto como se reanuden en la Unión Europea las reuniones sobre la financiación de los fondos europeos para 2021, optaremos a ellos».
Confiesa María Izquierdo que, pese a lo mucho que ha perdido la obra, en parte debido al vandalismo, que ha llevado a algunos desalmados a garabatear las propias pinturas del creador vasco, su «fotogenia sigue siendo bárbara». Una prueba es el certamen fotográfico abierto por su asociación y que está dando pruebas de que, ante la cámara, su belleza casi permanece intacta. Pero eso es solo un espejismo, pues la realidad es que desde 2001, cuando quedaron inaugurados, su envejecimiento no ha hecho más que avanzar.
